sábado, 9 de octubre de 2010

Hipnosis musical

¡No puedo con "La vie en rose"!

Lo que provoca esta melodía al colarse por mis oídos es prácticamente indescriptible; pero lo intentaré.
No sé qué leches pasa pero cada vez que suena en algún lugar y yo estoy ahí para captarla, me quedo como petrificada, sin poder moverme y casi sin poder respirar. No se me pone la carne de gallina (bueno... a veces), es simplemente que mi cuerpo se para. Como si mi cerebro solo fuese capaz de concentrarse en la melodía y no pudiese hacer nada más.

Y siempre me pasa lo mismo. Mi cuerpo se para y yo me quedo mirando al vacío. Por no hacer... ni pienso. Mi mente se queda en blanco.

He observado que soy especialmente sensible a las versiones de "la vie en rose" instrumentales, especialmente si está tocada con trompetas o acordeón de los años 30 y con el sonido rasgado de la época. La voz no está y puede que sea justamente por eso por lo que creo que me hace más efecto. Porque falta algo y mi cerebro se para como diciendo "un momento, esto está incompleto".

No sé de lo que habla. Nunca me he parado a escuchar la letra, más que nada porque creo que nunca he escuchado "la vie en rose" por el hecho de ponérmela directamente. Siempre ha sonado por casualidad. Una película, andando por la calle, como fondo de un comentarista en la radio...

Y creo que en el fondo "no quiero" saber de lo que habla. Supongo que hablará del amor, despechado, solitario... Me gusta la idea de no saber lo que dice, porque así lo que me provoca dentro es algo mío y solo mío. Si supiese el contexto, creo que la perfección cambiaría para siempre. Y a mi me gusta eso de estar comprando en el supermercado, que suene la melodía y quedarme como una imbécil con el carro en la mano, mirando las latas de atún, como si de ellas se despidiese la mejor vista del mundo.


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